martes, 22 de mayo de 2012

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Verona, Italia

¡Paz, mis queridos hijos!

Soy la Madre de Jesús y la Reina del Rosario y de la Paz. Hoy los invito a amar.

Hijos míos, dicen que aman, pero aún no aman verdaderamente. El amor transforma sus vidas y los libera de toda falta de paz. Amen, amen, amen, porque con el amor sanan sus almas y liberan a sus familias del mal y del diablo que quiere aprisionarlas.

Hijos, les pido: oren, oren mucho por el mundo. El mundo se ha alejado de Dios y muchos ya no se preocupan por el Señor.

Regresen a Dios. Permitan que mi Hijo Jesús esté en sus corazones y en sus vidas.

¡Verona! ¡Verona! Dios se deja encontrar en la oración y en el silencio. Regresen, regresen. Dios los está llamando. Familias de Verona, oren y regresen a Dios, abandonando el pecado. Dios, mis hijos, desea salvar a sus familias. Abran sus corazones y pidan perdón por sus pecados.

Los amo y los bendigo con mi bendición maternal: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!