Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Lumiére, Francia

Santuario de Nuestra Señora de la Luz

Estaba orando frente a la imagen de San José con el Niño Jesús. Mientras hacía mis oraciones, vi que los pies de la imagen del Niño Jesús comenzaron a cobrar vida y moverse, al levantar la cabeza él y San José estaban allí frente a mí, vívidamente ante mí. La imagen había desaparecido y solo ellos dos estaban allí. San José fue quien me dio el mensaje:

Te agradezco, mi amado hijo, por venir aquí ante mí para rogar las bendiciones de Dios para ti y tus hermanos. Dile a tus hermanos que soy benevolente y que Mi Corazón Inmaculado vela por la salvación y conversión de todos. Jesús me permite conceder grandes gracias a aquellos que recurren a mi intercesión y mi protección. Mi Hijo Infante, tan santo y Divino, bendice de manera especial a todos aquellos que difunden mis glorias y mi amor paternal. Aquellos que me han amado y honrado tanto, no serán abandonados ni olvidados por mí. ¡Estos niños nunca verán las llamas del infierno, sino la gloria del cielo!