lunes, 17 de septiembre de 2007

Lunes, 17 de septiembre de 2007

(San Roberto Belarmino)

Jesús dijo: “Mi gente, tienen muchas necesidades en su vida diaria en la tierra. Antes de que Me pidan cualquier cosa, Yo conozco todas sus necesidades. Muchas veces Me suplican empleos, la curación de enfermedades, y en algunos casos comida u otras necesidades básicas. Les he dicho en los Evangelios: (Mateo 7:8) ‘Porque todo el que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.’ Así como el centurión tuvo fe en que Yo podía curar a su siervo enfermo, así Mis fieles necesitan tener fe en que Yo responderé a sus súplicas. Así que no se preocupen por si tendrán comida para comer, ropa para vestir o un refugio donde quedarse. Si Yo alimento a los pájaros del aire y visto a los lirios del campo con color, seguramente ustedes valen más para Mí que estos. Invoquen Mi Nombre con fe para todas sus necesidades, y Yo proveeré para todas sus necesidades básicas. Con fe y buscando empleo con Mi ayuda, podrán proveer para ustedes y su familia. Enfrentarán muchas pruebas y desafíos en su vida, pero con paciencia tendrán la gracia para soportarlos. Mantengan la confianza y la fe en Mí en sus oraciones, y no tendrán nada que temer o por lo que preocuparse.”

Jesús dijo: “Mi gente, no importa cuánto intenten evitar sus responsabilidades, la sombra de Mi cruz siempre estará sobre ustedes. No es fácil seguir las restricciones de una vida santa cuando se enfrentan a tantas tentaciones mundanas. Si quieren obtener la vida eterna en el cielo, deben tomar su cruz a diario y seguir Mi Voluntad obedeciendo Mis Mandamientos. Deben someterse a la obediencia a Mí y a su consejero espiritual, en lugar de hacer solo su propia voluntad. Aquellos que solo siguen lo que desean, no están abriendo sus corazones a Mi amor o siguiendo Mis caminos, sino que solo están siguiendo caminos terrenales. Esta vida terrenal pasará,

pero su vida espiritual perdura para siempre. Su alma anhela estar Conmigo para encontrar la verdadera paz. Es mejor satisfacer los deseos del alma que los deseos del cuerpo. Consagren todo a Mí todos los días para que pueda usarlos en el cumplimiento de su misión. No huyan de su cruz, sino tómenla libremente y con amor para que puedan crecer en su fe y acercarse a ser un santo para entrar en el cielo.”