lunes, 19 de noviembre de 2007

Lunes, 19 de noviembre de 2007

Jesús dijo: “Mi gente, Yo soy la Luz del mundo y abro vuestros ojos a la fe, tal como curé al ciego en el Evangelio. Todos tenéis una elección por vuestro libre albedrío, ya sea permanecer en la oscuridad de vuestro pecado, o podéis venir a Mi Luz y Yo os mostraré el camino al cielo. La fe es un don para creer en Mí como el centro de vuestra vida. Si tenéis fe verdadera en Mí, entonces seréis capaces de muchas cosas que no pensabais posibles por vuestros propios medios. Pero cuando seguís Mis caminos, la vida os abrirá muchas oportunidades de gracia ante vosotros. Cuando tenéis Mi paz y alegría dentro de vosotros, no podéis simplemente guardarla para vosotros mismos. Mi amor quiere ser compartido con todos. Es vuestro pecado lo que os retiene de ser la persona que Yo quiero que seáis. Abrid vuestros corazones a Mi Palabra y escuchad lo que quiero que logréis. Ya no seguiréis vuestra voluntad, sino que os entregaréis por completo a Mí. Entonces lograréis grandes obras para Mi mayor gloria en todos vuestros esfuerzos de evangelización. Salvar vuestra alma y las almas a vuestro alrededor es vuestra misión de amor. Con Mi ayuda podéis compartir vuestro amor conmigo y con vuestro prójimo. Invocad al Espíritu Santo para que hable a través de vosotros las palabras que podrían llevar Mi amor a los demás. Así como veis el amanecer de un nuevo día llegar a vuestros ojos, así Mi Luz llega a vuestros corazones y ya no estáis ciegos, sino que veis con los ojos de la fe.” Jesús dijo: “Mi gente, he mencionado antes que veríais sequías continuas en varias partes de vuestro país. Esta visión de una alcantarilla seca es incluso una indicación de que estas sequías podrían incluso empeorar. En Occidente dependen de fuertes nevadas en las montañas para proporcionar su agua de deshielo a sus ríos. Una reducción de la nieve invernal también podría amenazar su suministro de agua. Los lugares del Sur se han secado mucho con precipitaciones considerablemente por debajo de lo normal. Cuanto más cálidas se vuelven vuestras estaciones, menos posibilidades hay de lluvia, y la evaporación afectará a vuestros lagos y embalses. Os he dicho también que las fuentes de agua dulce están disminuyendo, y más población lo empeorará. Rezad por lluvias continuas para ayudar a las zonas de sequía severa. Llovió después de que el gobernador de Georgia rezara por la lluvia.”