viernes, 28 de agosto de 2009

Viernes, 28 de agosto de 2009

(San Agustín)

Jesús dijo: “Mi gente, esta parábola de las vírgenes sabias y necias se trata de todo el tiempo del juicio final. Generalmente es una advertencia a la gente para que esté lista cuando yo venga como el Novio en el tiempo del juicio. Porque no conocéis el día ni la hora de Mi venida, pero necesitáis estar listos con un corazón puro, incluso como estáis preparados para morir en estado de gracia. Las vírgenes sabias están preparadas en sus almas con buenas obras en sus manos, como yo les daré la bienvenida a Mi Banquete de Bodas en el cielo. Las vírgenes insensatas o necias son aquellas que atraviesan la vida por placer para sí mismas sin preparar sus almas, y están en estado de pecado mortal, sin prepararse para encontrarme en su juicio. Estas son las que yo dije: ‘No os conozco’. Estas son las que no pueden ganar el cielo, sino que serán arrojadas al infierno donde habrá rechinar de dientes. Así que sed como las vírgenes sabias y estad siempre listos para Mi venida en el juicio.”

Jesús dijo: “Mi gente, vuestra tradición dice que San José o un ángel ayudó a las hermanas construyendo una escalera única al coro sin soporte aparente ni clavos. Se han añadido algunos barandales adicionales por seguridad, pero muchos vienen a ver esta escalera milagrosa. Llamaré a Mis ángeles para que vuelvan a bajar en Mis refugios para ayudar a construir a todos algún tipo de refugio. Construirán réplicas de lo que ya está presente. Todos tendrán todas sus necesidades atendidas, pero sin mucho de vuestro entretenimiento electrónico. Rezad por vuestra protección y por la conversión de los pecadores.”