sábado, 7 de noviembre de 2009

Sábado, 7 de noviembre de 2009

Jesús dijo: “Mi gente, ahora no piensan nada sobre leer su Biblia, sus libros sagrados, o sus libros de historia antiguos. Pero cuando los malvados empiecen a censurar incluso sus libros de lectura, entonces les resultará difícil encontrar libros de Dios y libros de historia antiguos. Incluso si estos libros se encuentran en su posesión, los encarcelarán por difundir propaganda. Esto ha sucedido en Alemania bajo Hitler, y en Rusia y China. Estos maestros malvados están en contra de la Palabra de Dios y toda expresión de la verdad incluso en su literatura. Una vez que pierdan el derecho a la libertad de expresión, entonces no serán más que esclavos de sus dictadores. Aprendan estas lecciones de la historia, o vivirán para repetirlas cuando América sea tomada por dictadores. Una vez que Me eliminen de sus lugares públicos y hogares, entonces están invitando a los maestros malvados a controlarlos. Despierten, América, antes de que sea demasiado tarde para cambiar su destino.”

Jesús dijo: “Mi gente, tienen otra batalla por la vida en curso sobre su tema del aborto. El lado malvado ofrece la muerte como su respuesta a los embarazos problemáticos. Por eso el movimiento pro-aborto es parte de su cultura de la muerte. Su gente pro-vida está instando a las madres a tener a sus bebés, incluso si significa dar a los bebés en adopción. Para las madres que quieren quedarse con sus bebés, tienen centros de ayuda para mujeres que proporcionan necesidades para el bebé a medida que los crían. Esta bifurcación en el camino no es solo una elección de tener al bebé o matar al bebé, sino que es la elección de tomar ya sea el camino ancho al infierno, o el camino estrecho al cielo. Aquellos que comienzan por el camino al infierno, aún pueden cambiar de dirección en cualquier momento antes de su muerte. Aquellos que eligen el camino estrecho, aún necesitan perseverancia en sus oraciones, Misa, y buenas obras. Mis fieles también son llamados a evangelizar almas y salvar incluso estas almas perdidas de ir al infierno. Al final se les pide que elijan ya sea la bendición o la maldición. Aquellos que eligen la vida, son las almas en el camino correcto hacia el cielo.”