martes, 16 de febrero de 2010

Martes, 16 de febrero de 2010

Jesús dijo: “Mi gente, les he hablado mucho sobre las cosas que la gente conocía en Mis días en forma de parábolas, para que pudieran empezar a entender los paralelismos de su vida física con su vida espiritual. En el Evangelio de hoy les advertí a la gente que evitaran el levadura o fermento de las enseñanzas de los fariseos y Herodes. Sus obras se hacían para lucimiento, pero sus corazones estaban lejos de Mí. Entonces recordé a Mis apóstoles Mi levadura o enseñanza al multiplicar el pan y el pescado para los 5.000 y los 4.000. Tomé lo poco que tenían y hice que hubiera suficiente comida disponible para que todos tuvieran algo con un excedente de doce cestas y siete cestas. Esta multiplicación de alimentos y refugios se proporcionará de nuevo en Mis refugios. También multiplico Mi Presencia en el pan de la Sagrada Comunión. En la visión, la gente ata sus barcos al muelle para que los barcos no se alejen, y están protegidos de las tormentas en la seguridad del puerto. Esto es simbólico de cómo quiero que estén atados a Mí en la fe en la seguridad de Mi protección de los demonios que los tientan en el ‘mar de la vida’. Al permanecer en el puerto de Mi gracia, su alma puede permanecer pura y libre de pecado. También soy como un ancla que los mantiene alejados del pecado. Quiero mantenerlos en Mi redil para no tener que buscarlos como una oveja perdida. Cuando son desviados por las atracciones y curiosidades del mundo, así como por los confort y deseos, entonces están arriesgando la pérdida de su alma en el infierno. Al regresar a Mí en la Confesión o aferrarse a Mí en sus oraciones diarias, pueden seguir el camino estrecho al cielo. Prepárense para mejorar su vida espiritual con sus próximas devociones de Cuaresma.”

Jesús dijo: “Mi gente, algunos refugios no solo estarán protegidos por Mis ángeles de la vista, sino que se construirán detrás de colinas y en áreas rurales alejadas. Incluso cuando aviones y helicópteros vuelen sobre estos refugios, no se verán. Protegeré a Mis fieles de los malvados en Mis refugios de maneras milagrosas. Cuando estén allí, sus condiciones de vida serán más rústicas con pocos de los confort a los que están acostumbrados hoy en día. Preparar alimentos, bañarse, dormir y cualquier entretenimiento será más una tarea como en tiempos antiguos con poca o ninguna electricidad. Sus condiciones de vida serán más como vivir en un monasterio donde la oración y la adoración a Mí serán su punto focal. Esto será una penitencia y preparación espiritual para su llegada al cielo. Ustedes mañana comienzan otra Cuaresma que se centra en más oración, ayuno y limosna. Utilicen cada Cuaresma para purificar su vida espiritual, y estén preparados en cualquier momento para partir hacia Mis refugios.”