miércoles, 23 de enero de 2013

Sabemos lo difícil que es para ustedes, hijos de hombres, soportar la injusticia con humildad.

- Mensaje No. 17 -

Hijo mío. Sé bienvenido. Tu camino es arduo, pero lo recorres con valentía. Que la tormenta de hoy sea simbólica de lo que te espera. Además de inquietud, trae mucha purificación, así que no te preocupes y espera lo que viene. Todo sucede a su tiempo, Hija mía, Hijo amado mío. .

Tú, Hijo mío, estás protegido. Sin embargo, te enviamos a través de valles de lágrimas. Es porque es necesario en el Cielo.

Sabemos muy bien lo difícil que es para ustedes, niños humanos, soportar / aguantar la injusticia con humildad, pero como una vez Jesús volvió la otra mejilla, ustedes también deben aprender a permanecer humildes y en paz. No abras la puerta al diablo en tales momentos, sino invoca a Dios Padre. Él te ayudará. Siempre recuerda esto. Cuando lo invoques en la angustia, Él envía inmediatamente a Sus santos ángeles. Incluso si la otra persona continúa enfureciéndose, como en tu caso, los ángeles te ayudarán, Hijo mío, a soportar todo el mal en silencio. Para la otra persona, este, tu silencio, será mucho peor que tus palabras malvadas, hasta el punto de la intolerabilidad. Siempre ten esto presente, Hijo mío.

Ve ahora, Hijo mío. Tus hijos te están esperando. No tengas miedo, y permanece siempre en la confianza. Te amamos y siempre estamos contigo. Pronto, muy pronto, volveremos a hablarte. Los mensajes deben continuar para que tantos hijos de Dios como sea posible nos conozcan.

Te amo, Hijo mío. Todo estará bien.

Tu Madre en el Cielo.