martes, 2 de abril de 2013

Cree en Jesús, y reza por todos Sus enemigos.

- Mensaje No. 84 -

Hijo mío. Querido hijo mío. Es muy importante que continúes escribiendo para Nosotros, para que Nosotros, Mi Hijo y Yo, podamos alcanzar y salvar muchas más almas.

Hijos míos. Es muy importante que recen por el falso líder en el Vaticano. Aunque no fue elegido por Mi Hijo, es un hijo de Dios, un hijo de Dios que se está desviando y quiere llevarlos a la ruina. Su "cliente" es el diablo mismo, pero Mi Santo Hijo, Jesucristo, desea que también se ore por esta alma.

La magnitud del bien que todas sus oraciones lograrán aún no es evidente para ustedes, Mis amados hijos, hoy, pero con el tiempo notarán el bien que ayudará a muchas almas a encontrar su camino de regreso a Mi Hijo y a la verdadera Iglesia Católica, Su Santo Cuerpo aquí en la tierra.

Hijos míos, incluso si no entienden (en este momento), recen por todos los líderes de la Iglesia Católica. Oren por sus políticos y siempre pidan la claridad del Espíritu Santo. Pronto, muy pronto, reconocerán los "obstáculos" del mal, que serán cada vez más, y a través de todas las contradicciones y distracciones, incluso el último de Nuestros hijos confundidos tendrán sus "ojos y oídos", sus corazones abiertos, y todos volverán a Mi Hijo. El falso profeta ya no tendrá poder sobre ellos, y el triunfo de Mi Hijo se apoderará incluso donde nunca lo habrían sospechado.

Hijos míos. Cree en Jesús. Reza por todos Sus enemigos y siempre ten el coraje de defender Su Santa Palabra. Nosotros les ayudaremos. Pídanos especialmente en momentos débiles: Oración No. 13: - Oración por la fuerza y el cambio personal.

Señor, dame la fuerza que necesito para defenderte siempre.

Señor, ayúdame a sentir amor incluso por mi peor enemigo.

Señor, hazme fuerte en la lucha por las almas, para que siempre tenga la fuerza de orar según Tus intenciones.

Señor, perdóname también cuando peco.

Tuyos seré, ahora y para siempre.

Amén.

Mis amados hijos. Recen esta oración a diario, y traerá mucho cambio.

Gracias por responder a Mi llamada.

Su amorosa Madre en el Cielo.

Gracias, hijo mío, por escribir para Nosotros. Te amo. Tu Madre en el Cielo.