sábado, 4 de febrero de 2006

Yo, Jesucristo, les informo hoy que estoy probando a todos ustedes, incluyendo a Mis elegidos, en este momento. Es el tiempo de Mi purificación de Mi única, Santa, Católica y Apostólica Iglesia. Pruebo a todos Mis amados pastores para ver si perseverarán en la Iglesia purificada por Mí. Ellos son formados por Mí y Mi Madre en caracteres sacerdotales libres, en personalidades independientes que pueden guiar a Mi rebaño con seguridad a la nueva orilla. Todas las vides en Mi vid que no son seguras y sólidas las separo. Son ramas de vid marchitas. También ustedes, Mis amados, los separo de estas personas.

Estén vigilantes, pues Satan anda como un león rugiente, tratando de devorar a todos aquellos que no están completamente fortalecidos, incluso en la batalla final. Resistan esta corriente y naden contra ella. Recibirán muchas hostilidades, burlas y calumnias. Yo, Jesucristo, lo permito. Será una prueba y una humillación para ustedes.