Preparativos Finales
¡Importante llamamiento de Dios Padre a todos!
Antes de que desencadene Mi Brazo con TODA Su Fuerza, CONTRA el Planeta Tierra, quiero INVITAR A TODAS LAS PERSONAS a que sigan Mis Indicaciones y Mis Instrucciones que daré en este Mensaje porque quiero que TODAS LAS PERSONAS, sean SALVADAS y vengan a Regresar a Mi Casa de donde vinieron, de donde salieron y de donde están. (Continua...)
Alerta Roja
El FIN de nuestra Libertad, de nuestra Existencia
El Nuevo Orden Mundial que le sirve a mi adversario ha comenzado ya a dominar en el mundo, su agenda de tiranía comenzó con el plan de las vacunas y vacunación contra la pandemia existente; vacunas estas que no son la solución, sino el comienzo del holocausto que llevará a la muerte, transhumanismo e implantación de la marca de la bestia, a millones de seres humanos.
(Continúa)
Mensajes de diversas orígenes
domingo, 25 de septiembre de 2022
Nuestro Señor nunca aprobó que las mujeres estuvieran alrededor del Altar
Mensaje de Nuestro Señor a Valentina Papagna en Sidney, Australia
Hoy, durante la Santa Misa, justo antes de la distribución de la Sagrada Comunión, mientras una joven se dirigía al Sagrario para llevar el Copón al Altar, Nuestro Señor dijo: «Mirad eso. Una mujer enviada a abrir Mi Lugar Sacratísimo y a llevar Mi Santo Cuerpo al Altar para ser distribuido».
"¡Nunca aprobé que las mujeres se acercaran a Mi Altar, y nunca lo haré! Yo elijo a Mis Discípulos, y eso permanecerá para siempre. Ahora, las mujeres presionan para venir a Mi Altar y servirme. Mi ira es grande al ver todo esto. Reza por ellas, pues cuando llegue el momento en que Yo juzgue, juzgaré con severidad. Reza para que aún pueda ser misericordioso con ellos por toda esta maldad, forzándose a venir a Mi Altar».
Nuestro Señor me miraba y luego dijo muy severamente: «Valentina, hija Mía, no Me hagas nunca eso porque Me ofenderías mucho, hasta el punto de perder incluso la vida; esto es en la eternidad.»
Entonces Nuestro Señor me pidió que reparara estas ofensas. Hice la reparación inmediatamente después de la Sagrada Comunión, tal como Nuestro Señor me pidió. Luego, me pidió de nuevo que reparara después de la Santa Misa ante el Santo Tabernáculo, y así lo hice.
Intentamos complacer a la gente aquí en la tierra y colocarla en una posición más elevada en la Iglesia. Pero, ¿se preguntan siquiera: 'Complacemos a nuestro Señor haciendo esto? No, Dios quiere que las mujeres permanezcan humildes y no estén cerca del Altar.
Muchas veces nuestro Señor me dijo: «No quiero mujeres alrededor de Mi Sagrada Mesa para servirme».
Señor Jesús, ten piedad de nosotros.
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