Sábado, 18 de diciembre de 1999

Jesús dice: "Soy tu Jesús, nacido Encarnado. Hija, deseo ahora describirte las profundidades del alma que reside en la Cuarta Cámara de Mi Sagrado Corazón. Tal alma desea estar en esta Cámara más que nada. A través de su deseo de unirse a Mí, ha renunciado a todos sus propios deseos - es decir, a su propia voluntad. Tal alma sabe muy bien su pequeñez ante Dios. No busca alabanza ni reconocimiento por ningún buen acto, pues sabe que toda bondad fluye de Dios. En su humildad, desea el anonimato. Anhela ser pequeño a los ojos del mundo. Así, el alma está inmerso en humildad y mansedumbre. Cuando el alma experimenta cualquier prueba, la devuelve inmediatamente a Mí. Por lo tanto, compartimos cada cruz juntos."

"El alma en la Cuarta Cámara de Mi Corazón no conoce el miedo. Siempre está en paz, incluso en medio de la mayor prueba. En cada momento presente, tal alma ve la Santa y Divina Voluntad de Dios. La Cuarta Cámara de Mi Corazón es el objetivo final de cada alma, aunque pocos la alcanzan. Cada Cámara que precede a esta Cuarta y Última Cámara hace que el alma desee la unión perfecta cada vez más. Esta Cuarta Cámara está compuesta por los mártires vivos del amor. Te complacerá hacer esto conocido."