Tratado de la Santísima Madre a sus fieles remanentes y a la Confraternidad de los Sagrados Corazones

Nuestra Señora viene enmarcada en el Rosario de los No Nacidos. Ella dice: "Alabado sea Jesús."

"Queridos hijos, por favor, entiendan que estoy hoy aquí como lo estuve en Fátima. La energía plena del Cielo exhorta sus oraciones y sacrificios. Cuando aparecí en Fátima, el mundo estaba envuelto en la guerra. Hoy, Mis hijos, sigue siendo así, y la guerra se ha intensificado. Se lucha en cada corazón humano. Es la batalla entre el bien y el mal. Cuando el mal vence a un corazón, el pecado es el resultado. Por eso tienen el aborto, el terrorismo y toda forma de indecencia humana."

"La gran apostasía de la fe que revelé a los niños en Fátima está dentro de la Iglesia hoy. Las personas que buscan su propia agenda fueron fácilmente seducidas por Mi adversario. El Santo Padre que ya ha ganado la corona de la santidad sufre en gran medida. Esta apostasía, ven, alcanza incluso las posiciones más altas dentro de la Iglesia misma. Así que, Mis pequeños hijos, entiendan que debido a que esta apostasía permanece vestida de bondad, es una amenaza aún mayor para los fieles."

"No debemos ceder en la oración y el sacrificio durante estos últimos tiempos. Mi Manto de Protección está sobre los fieles remanentes."

"Hagan esto conocido."