martes, 24 de diciembre de 1996

Mensaje de Nuestro Señor a María do Carmo en Manaus, AM, Brasil

Mis hijos, muy amados por mí y por mi Hijo Jesús, les deseamos mucha paz en sus corazones y mucha felicidad en sus vidas y en las vidas de todos sus familiares. También les pido que oren más para mantener alejado al enemigo de ustedes y de todas las personas en todo el mundo.

Nuestro enemigo es astuto y tiene el poder de hacer cosas malas a las personas, tratando de robar almas a mi Hijo Jesús para llevarlas al infierno. ¡Y esto no queremos, mis hijos! Sí, queremos todos ustedes, un día en el cielo con nosotros. Así que, oren con fe todos los días por la salvación. Pidan con fe la iluminación del Espíritu Santo, porque quien tiene el Espíritu Santo en su vida lo tiene todo en especial.

No olviden que hoy es Nochebuena, es la víspera del cumpleaños de mi Hijo Jesús Cristo. En su cumpleaños, él llora mucho de alegría y también de tristeza, porque todavía hay muchas personas que pasan hambre y están necesitadas. Por esto también deben orar mucho para poner fin al sufrimiento de las personas. Hagan caridad, caridad, caridad tanto como puedan, porque les prometo a todos un lugar en el Cielo para quien haga caridad a una persona. Gracias por atenderme. Les bendigo: en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Amén. Amén.

La Virgen María

Jesús, inmediatamente después, habló a mi madre:

Ya estamos en los últimos tiempos y el tiempo es muy corto, así que amen a sus hermanos como yo y mi Madre los aman. Estén con mi paz. Gracias por atenderme. Les bendigo: en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Amén. Amén.

Jesucristo