Mis hijos, una vez más les repito: - ¡Soy la Madre y Reina de Brasil! Deseo guiarlos en el camino del Verdadero AMOR y darles Mi Paz!
Recen el Rosario y hagan penitencia por todo el mundo! Mis queridos hijos, quiero ayudarlos. ¡Ánimenlos en el camino de Nuestro Señor! Quiero vestirlos con mi humildad, serenidad y bondad. Quiero, mis hijos, ayudarlos en el camino del AMOR! ¡Recen! ¡Recen! ¡Recen continuamente a DIOS para aumentar su Fe!
¡Salvaré a Brasil! Hoy, Mis hijos brasileños enfrentan serias dificultades: - hambre, miseria, desempleo, enfermedad, falta de fe, falta de amor! El crimen, la violencia, las drogas, el divorcio, la televisión, el mal, el egoísmo destruyen y condenan a Brasil a un futuro oscuro! Pero, al final, MI Inmaculado Corazón TRIUNFARÁ!
¡Salvaré a mi Brasil! Les daré mi AMOR, mi Misericordia y mi Consuelo! ¡No los dejaré huérfanos! Mi Hijo Jesús Me envió aquí para ayudarlos! Vine a aliviar su sufrimiento! ¡Recen mucho!
Bendigo a mi Brasil, mi Santuario de Aparecida, y a todos aquellos que trabajan en él, mis hijos de esta Ciudad Elegida (Jacareí) en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.