lunes, 29 de mayo de 1995

Mensaje de Nuestra Señora

Primera Aparición de este Día

"- Queridos hijos, hoy ( . ) quiero decirles que ¡sigo afligida por sus pecados!

Entiendan, mis queridos hijos, que toda madre que AMA sufre por sus hijos. Yo soy la Madre de cada uno de ustedes, y por eso sufro por su salvación!

Cuántas veces busco una gota de arrepentimiento en mi corazón, y sin encontrarla, tengo que derramar una abundante, amarga lágrima. (aquí ella interrumpe y llora)

¡Arrepéntanse, queridos hijos! ¡Arrepéntanse por todo el mal que hacen! Deseo que sus corazones estén llenos de AMOR, llenos de Gracia, llenos del Espíritu Santo! Por lo tanto, queridos hijos, deseo que sus corazones se abran al AMOR y a la oración".

Segunda Aparición

"- Queridos hijos, quienes hoy han venido una vez más a encontrarse con mi Inmaculado Corazón! ¡Los amo! ¡Los amo! ¡Los amo!

¡Que la Paz de Jesús esté en sus corazones! ¡Que el AMOR del PADRE en el Cielo more en sus almas! ¡Que el Espíritu Santo de AMOR los guíe por el camino de la santidad!

Queridos hijos, hoy quiero hablarles sobre la Santa Misa.

Les he dado muchos, muchos Mensajes sobre la Santa Misa. Ya les he dicho qué es y qué significa. Digo ahora, que la Santa Misa está dejada de lado. Nadie más va a Misa con el corazón.

Los hombres se comportan en Misa como si Jesús no estuviera presente. ¡Nunca deben ir a Misa y quedarse allí mirando, como si Jesús no estuviera allí! Les pido que participen verdaderamente en la Santa Misa con el corazón! Participen en la Santa Misa como si hubieran ido a una Gran Fiesta, para encontrarse con mi AMADO!

Recuerden lo que les dice el Sacerdote: ¡Felices los invitados a la Cena del Señor!

Recen el Rosario todos los días, pidiendo al Señor esta Gracia para mis Manos: - La Gracia de tener ojos puros, para ver lo preciosa que es la Misa; lo poderoso que es la Santa Misa y cuánto es la Misa el Mayor Don de DIOS para ustedes!

Queridos hijos, mientras Jesús está en el Cielo, los Ángeles y Arcángeles lo adoran cara a cara. Pero cuando el sacerdote dice: "Toma y come, que es mi cuerpo; toma y bebe, que es mi SANGRE, Jesús desciende de las alturas del cielo y viene a descansar sobre el Altar, oculto bajo las apariencias de pan y vino. Ustedes no ven a Jesús, pero sí lo ven. Él está allí, VIVO, tan real como lo tuve en Mis Brazos de Madre!

Los Ángeles también descienden alrededor del Sacerdote y de la Mesa Eucarística, continuando en adoración. Entonces, cuando el Sacerdote les trae la Comunión y la reciben, los Ángeles también se arrodillan a su lado para adorar a Jesús, que está dentro de sus corazones! Ponen a Mi Hijo en guardia hasta que se cumpla el encuentro de DIOS con el alma.

En la Eucaristía, es Jesús quien los toma, los transforma, quien los recibe y los transforma en Él, para que se cumpla la PALABRA que ÉL dijo: Sean uno, OH PADRE, como TÚ y Yo somos UNO.

¡Oh hijos! Las Almas del Purgatorio. ¡Cuánto sufren! Muchas de ellas están inmersas en ese fuego ardiente, el fuego que las quema, que las devora todo el tiempo sin descanso!

No hay mayor tesoro, no hay mayor alivio que puedan ofrecer a las Almas del Purgatorio que la Santa Misa!

Si vieran a sus familiares todos dentro de un fuego, ¿no harían un esfuerzo por salvarlos? ¿No lo harían?

Así que si quieren ayudar a sus familiares ya fallecidos y a las Almas Santas del Purgatorio, ofrezcan muchas Misas, pero participen también en estas Misas ofrecidas, con AMOR, con Afecto y con Fe!

Este es el PODER de la Santa Misa: - ¡Un terremoto puede ser prevenido por la Santa Misa! ¡Una guerra puede ser detenida por la Misa, porque en ella está Jesús! Jesús baja para hacerse Verdadero Alimento de ustedes!

¡Entréguense! ¡Conságranse en Mis Manos!

Los bendigo a todos en el Nombre del Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo. ¡Vayan a la Santa Misa! Allí estará su salvación".